La 4ta entrega de The Matrix llegó en 2021 a cines pero, hoy, ha llegado de manera oficial a HBO Max y con ella, la expectativa bastante baja ante el muy "tibio" recibimiento que tuvo esta secuela.
Y para darles contexto, Matrix tenía muchos años sin algo relevante. Muchas reediciones de las versiones originales en formatos nuevos y claro, recuerdos gratos de una saga que logró catapultar a la fama máxima a Keanu y que ha creado un culto alrededor que se volvió un fenómeno global recordado con cariño.
La primera cinta salió en 1999 y fue un parteaguas a un género que se sentía muy gastado como el Sci-Fi. Ese momento abrió la puerta a miles de cosas y teorías locas, además de volverse una de las cintas más amadas de 1999. Posteriormente, en 2003, dos secuelas llegaron a cines y, aunque no tuvieron un recibimiento tan bueno, son recordadas de buena manera y ampliaron el status de culto que la primera cinta ya tenía.
Y así llegamos al 2021, 22 años después de la primera Matrix, con una nueva entrada que además, cuenta con el regreso de Neo y Trinity, obviamente interpretados por Keanu Reeves y Carrie Anne Moss, además del regreso de Jada Pinkett Smith y otros miembros del cast original. Desde sus tráilers, la expectativa fue brutal y la gente esperaba un resultado importante para revivir la franquicia y volver a la Matrix como se debía.
Pero desafortunadamente, no, no fue el caso y sí, seguro pensarás que tenemos cierta resistencia al cambio pero no es el caso. The Matrix Resurrections falla notablemente y aquí te diré por qué.
Un fallido intento de crear una nueva experiencia retomando lo original
Uno de los errores que la cinta comete es el intentar crear un mundo aparte que de cierta manera, crea una experiencia dentro de la otra experiencia. Suena raro, sí, pero es una situación en la cual Thomas Anderson (Keanu Reeves) es un desarrollador de videojuegos que es afamado por crear "The Matrix" para Warner Bros. Un videojuego que recrea la trilogía original y que en él, Neo es el protagonista junto con Morpheus y Trinity. Y bien, Thomas Anderson se encuentra en problemas mentales ante la insistencia de su jefe (Jonathan Groff) para hacer un reboot de la serie original y crear un nuevo juego que sea la secuela de The Matrix. Sí, algo similar a lo sucedido con Resurrections.
Sí, la premisa es interesante y tiene mucho de ese "tongue in cheek" que las Wachowski nos han acostumbrado. Sin embargo, la ejecución es muy atropellada. Mientras que los nuevos personajes no son malos y la verdad, funcionan bien, el desarrollo de la trama es evidentemente MUY forzado y eso genera un sentimiento general muy chato.
Otro punto es el error de recastear a Morpheus. Yahya Abdul-Mateen II es un gran actor, pero como Morpheus no se siente un personaje real y se pierde en el intento de hacer un Morpheus más joven y por ende, más over the top.
Y más allá del recasteo, es una película que no trasciende y que tiene puntos muy encontrados en la trama, con un guión débil que tiene que mostrar mil flashbacks para avanzar. En ese intento de auto referenciarse como una manera de criticar la situación actual de Hollywood, cosa que es muy interesante, el problema directo es que para llegar a ello, tenemos que pasar por escenas llenas de flashbacks forzados y una muy pobre historia de que ha pasado después de Revolutions.
Y si, muchos "cameos" logran sorprender (Merovingian), la mayoría se sienten como versiones muy mermadas de lo que fueron en la trilogía original.
Un cast interesante que se pierde en un mal guión
El cast de The Matrix Resurrections es bastante completo. El regreso de Trinity y Neo se ve opacado por la historia tan irregular, pero ambos hacen un buen papel y logran retomar un poco de lo que representaban previamente en la saga. De otra parte, lo más destacado de la cinta en términos actorales llega de la mano de Jonathan Groff y Neil Patrick Harris, que en sus papeles "antagónicos" logran crear una atmósfera interesante y le dan más sentido a la complicada trama.
Los demás logran bien su cometido, con una actuación safe de Erendira Ibarra y un buen regreso de Jada Pinkett Smith. De ahí en fuera, podríamos destacar a Jessica Henwick como Bugs en un papel decente que redondea lo nuevo del cast con los originales.
Veredicto Final
The Matrix Resurrections queda como una cinta muy decepcionante en la saga y un tropiezo estrepitoso que parece ha acabado con el futuro de esta saga. Y tal vez no es una cinta terrible, pero queda demasiado corta vs lo logrado en la primera cinta y claro, lo que cimentaron en las secuelas de 2003.
Sin duda Matrix Resurrections falla en cosas muy claras y mucho de ello se debe al intento de forzar situaciones que al final, no logran conformar una cinta completa. Eso sin contar el abuso de los flashbacks y la necesidad de explicar todo retomando lo realizado antes.
The Matrix Resurrections se queda con un 5 de calificación ¡Ah! Y el cover de Wake Up de Rage Against The Machine es para ponerle un -10. ¡TERRIBLE!
¿Ya la vieron? Cuéntenos su opinión.