Look me up in the yellow pages,
I will be your rock of ages
Por ahí de 2001, conocimos muchos a Robbie Williams por su video de Rock DJ. Posteriormente, el Sing When You Are Winning se convertiría en uno de sus mejores discos y lo llevaría a ser el artista más reconocido del momento (Excepto en USA). Videos como el de Rock DJ así como el de Supreme, harían que su trayectoria fuera siendo más fuerte. Para 2005-2006, Robbie Williams se convertiría en el artista más querido de la comunidad mexa y en el nuevo rey del pop (Otra vez, excepto en USA), con su álbum Intensive Care que denotó temas como Tripping y Advertising Space.
Su gira "Close Encounters" aterrizó con dos fechas en el Foro Sol, con dos conciertos magnánimos en donde abarrotó el recinto. Su primera gira en México fue un rotundo éxito y logró catapultarlo como el artista más escuchado en el país. Pero es curioso, en una gira sumamente exitosa mundial, Robbie se encontraba completamente desolado. Perdido, entre excesos y temas de depresión y ansiedad, buscaba salir del medio y dedicarse a la ufología. Así que, sin avisar nada, Robbie Williams decidió retirarse justo después de terminar su gira más exitosa.
En las sombras, Williams se descuidó y se dedicó a comer y a encerrarse con su ahora esposa Ayda. Fue hasta que Take That se reunió, que Williams decidió unirse a ellos. Y posteriormente, volvió a colaborar con su amigo Gary Barlow. Una vez que volvieron, Barlow ayudó a Robbie a desarrollar temas originales para el disco recopilatorio "In and Out of Consciousness" llamados "Shame" a dueto con él y "Heart & I".
Y así, Robbie Williams volvió con un disco inédito llamado Take The Crown en 2013, con temas escritos con Guy Chambers (el autor predilecto de toda la vida) y Gary Barlow. Resaltando que con Candy, Robbie volvió al radar mexicano y después tuvo un par de temas muy buenos. Sin embargo, a pesar de estar de vuelta en el radar mexa, la gira mundial de Robbie no llegó a nuestro país y, conforme pasaba el tiempo, veíamos más lejano su regreso. Y más porque el buen Robbie ya no era tan relevante para los mexicanos.
Llegamos a 2016, el lanzamiento de su álbum Heavy Entertainment Show abrió la puerta a regresar al país, aunque su álbum no sonó tanto acá. Y fue cuando, en una sorpresa total, Robbie Williams fue anunciado como headliner del Corona Capital del 2018. Su regreso fue un total éxito que puso a cantar a miles en un show sin precedentes en los que incluso estuvo acompañado por su padre al interpretar Better Man.
Pero a Robbie le encantan las sorpresas y así fue como, en medio de su gira XXV, fue elegido para ser el headliner del festival Tecate Emblema, volviendo a México después de 5 años de ausencia. Y ante las dudas por la edad y sobre todo, porque el público mexicano ya no está tan familiarizado con su música, Williams volvió a destrozar el escenario y brindarnos un show muy personal, enérgico y sobre todo, real.
No es mentira que Robbie ha lidiado con varias situaciones alrededor de su vida. Su ansiedad y depresión se han visto reflejadas en sus temas más personales como Feel, en donde abiertamente nos cuenta cómo se siente y cómo estaba su vida en ese momento. En muchos momentos de honestidad y de nostalgia, sumado a la manera en la que habló de él mismo y su trayectoria, sorprendido por el cariño mexicano, Robbie Williams hizo un statement que narra perfectamente su trayectoria: "Tengo dos tipos de canciones, en unas soy asombroso y lo mejor y en las otras estoy solo y necesito ayuda".
Más allá de la naturalidad de Williams en el escenario y su facilidad de ganarse al público con su comedia y con su talento, Robbie es un showman hecho y derecho, que gusta de hacer participe a su público y que en todo momento, está interactuando con la audiencia. Además, con la edad, Robbie se ha vuelto cada vez más honesto y ha dejado de a poco ese estilo de rockstar, gracias al nacimiento de sus hijos. En un momento sumamente enternecedor, Robbie observó a una niña en hombros pedirle un abrazo y, aunque no pudo dárselo, le dedicó el tema "Love my Life" y le deseó una vida increíble mientras le mandaba beso y se llevaba la ovación del respetable.
Ver a Robbie llena de gusto y de sentimientos muy lindos, si bien es un show lleno de baile y luces, ahora es un show lleno de nostalgia y sobre todo, de introspección. De un artista que a veces duda de sí mismo pero que hoy, más que nunca, le agradece cada etapa del camino a sus fans. Un tipo que hoy se ve completo, que hoy ya no tiene ese vacío que mencionaba en Feel. Hoy, Robbie ya puede decir "I Love My Life"
And finally
I'm where I want to be